Narra Sally:
Después de estirarme por completo y tallar mis ojos con mis manos, decidí abrirlos. Al ver dónde me encontraba, me senté exaltada mientras me cubría con la sábana ya que sentía un frío increíble...
Un gran mueble con frascos de pinturas por donde quiera, lienzos sin terminar, paredes manchadas por acrílico y... Yo, que no contaba con alguna prenda que me cubriera en esos momentos ahí, en la cama, en estado de "shock" comencé a deslizarme por ésta hasta levantarme; pude ver mi vestido tirado al igual que los tacones y mi demás ropa.
Escuché un leve crujido en la madera, voltee y terminé de ponerme mi ropa interior abrochando mi sujetador rápidamente.
-Stuart - Dije sorprendida al verlo.
Se recargó en el marco de la puerta y comenzó a mirarme.
-Hola...
-Hola - Crucé y froté mis brazos -Hace frío.
-Sí.
-¿Cerrarías mi...? - Señalé el cierre de mi vestido.
-Claro, claro.
Se acercó a mí y después de cerrar el cierre por completo, rozó mi piel con sus dedos.
-Esto es algo incómodo.
Rió levemente.
Voltee -Yo... Tú... Eh...
-¿No recuerdas nada?
Tomé aire para comenzar a hablar, pero la verdad es que ahora no podía recordar, y preguntarlo se me hacía algo más que obvio.
-Ya dijiste demasiado.
Bajé la mirada -Supongo que me tengo que ir, Gabrielle llegará en la tarde y... tengo que estar allá.
-¿Quieres que te acompañe?
Negué -No te preocupes. Nos vemos después.
-Bien - Besó mi mejilla.
Salí del pequeño departamento de Stuart y comencé a caminar hacia mi casa con el par de tacones en la mano. Seguía sin tragarme lo que sucedió en la madrugada.
Recordaba poco, el efecto del alcohol provoca que no recuerde cuando más quiero acordarme de la situación.
***
-¿Te encuentras bien?
-Estoy... bien.
-Sally, eres hermosa... Perfecta.
-Eso dices porque estás completamente ciego.
-O enamorado.
-O tomaste de más.
-No creo, cuando te conocí y pensé eso... No lo estaba.
***
Llegué a mi casa, subí las escaleras y lo primero que hice, fue entrar al baño. Abrí la regadera, me quité mi ropa... Y al meterme y rozar mi cuerpo con el agua caliente... Recordé más; las manos de Stuart repasando mis piernas, y cada sinuosidad con las que contaba mi cuerpo.
Al terminar de bañarme, cerré la llave y me envolví en la toalla. Salí, pasé mi mano por el empañado espejo y me observé... Ahora todo había cambiado. Recordaba los consejos de mi madre: "No te des por cualquiera, si no te ama... Si no lo amas. Todo a su tiempo"
Era estúpido, quería a Stuart... Mas no lo amaba, y fue la primera persona con la que pasé de unos simples besos y roces.
03:00am.
Narra Stuart:
Seguíamos caminando, seguía tomando mi mano y seguía tambaleándose en un plan contínuo por las calles húmedas de la pequeña ciudad.
-¿A dónde iremos? - Dije para romper el silencio.
-¿Qué importa? - Contestó.
-Estás temblando...
-¿Tú no tienes frío?
-Un poco.
-¿Tienes un cigarro?
Sentí mis bolsillos -Creo que no. Es muy tarde ya, ¿te acompaño a tu casa?
Suspiró -Eres muy dulce.
Se paró un momento, y me abrazó y besó en el acto. El beso era algo apasionado.
-¿Te agrado? - Acariciaba mi cabello.
-¿Bromeas? Me encantas.
-Estás loco - Se acercó a mí y me susurró -No quiero ir a mi casa.
03:30am.
Trataba de abrir la puerta de mi departamento mientras Sally me abrazaba y besaba mi cuello dulcemente. Pudimos pasar, cerré la puerta y cargué de ella.
Llegando a mi habitación, la dejé suavemente en la cama y repasé su cuerpo con mis manos y mirada. En pocos minutos, nos encontrábamos dentro de la cama sin ninguna prenda que nos cubriera.
-¿Tú...? Eh...
Rió y negó.
Comenzó todo, suavemente con un toque de dulzura mientras besaba su cuello y sus hombros.
-Eres tan... tan... hermosa.
Pequeños gemidos comenzaron a salir de lo más profundo de ella al tratar de contestarme.
-¿Te encuentras bien?
-Estoy... bien - Musitó.
14:50pm.
Pensaba en ir a buscarla y aclarar todo... Podía pensar que me había aprovechado de la situación en la que se encontraba... ó tal vez que ella aprovechó la situación.
Lo cierto era que, la habíamos pasado bien de alguna forma.
Narra Sally:
-¿Viste qué hora es?
-Sí, van a dar las 3.
-¡¿Dónde carajo te metiste?!
-Yo... Estaba con... una amiga.
-Te recuerdo que yo también pasé por tu etapa. Date cuenta Sally, ¡eres una niña aún!
-No es verdad, Gabrielle. Las dos sabemos muy bien que ya no lo soy. No me quieras controlar como lo hicieron en Francia... Tú no - Rendida, tomé asiento en la cama -Compréndeme.
-No, no te comprendo. ¡Paul es un niño igual! - Jaló mi brazo.
-¿Paul qué? Paul se puede ir al carajo, no estuve con él.
-¿En... Entonces? - Me miró sorprendida, a punto de llorar mientras me soltaba.
-No te incumbe Gabrielle.
-Lo que me faltaba... Me decepcionas Sally.
-¿A ti también? - Encogí los hombros -Ya no me sorprende, ¿sabes?
Antes de salir de la habitación para dejarme sola, volteó a decir unas cuantas palabras:
-Hablaré con tus padres. No puedes estar más en Liverpool, Sally, no con esa actitud.
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Subí pronto para no dejar que la intriga las ataque... Igual lamento si las dejé con intriga esta vez.
¡Gracias por leer y comentar que soy la persona más mala! Jajajajaja, sé que es verdad :(
En fin, las quiero mucho.
Igual espero el próximo capitulo... (?)
Cuídense mucho.
Bonita tarde-noche.
<3
Esperaba más detalles de aquella escena ;c JAJAJAJA soy una sucia.
ResponderEliminarMe puso triste lo que dijo Sally, "-¿A ti también? - Encogí los hombros -Ya no me sorprende, ¿sabes?" Ouu.
¿Se va de Liverpool? NOOOOO.
Jajajaja me hiciste reír con eso de que comentamos que eras una mala persona. No lo eres..., tanto :( jajaja es broma.
Cuídate mucho. Besos. <3
Omg quede en shock o.o no tengo palabras.... fue un GRAN capitulo sube pronto :) saludesss <3
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