martes, 30 de septiembre de 2014

Capitulo 85.

Viernes, 11 de Marzo de 1966.



En ese momento me encontraba en la cocina, completamente desorientado; "mal día para drogarse, ¿no es así?" me pregunté.

Sally estaba en la sala, cubierta con una manta y esperando el té que ahora estaba listo. Tenía que estar preparado para una gran historia.

-¿Quieres azúcar? - grité.
-... Por favor.

Coloqué todo en un platillo y fui a donde se encontraba ella, no sin antes lanzar un gran suspiro.

-Gracias - lo tomó con una sonrisa desganada.
-Sí... de nada - me senté a su lado -Ehm... ¿cómo estás?
Enfocó su mirada en mí -¿Cómo estoy? - suspiró -... Pues estoy bien, supongo.
-¿Ah sí? - me sorprendió su respuesta.
-Sí, después de decírtelo. Supe 'arreglar' todo, y me sorprende tanto como a ti... sólo que, necesitaba sacarlo de una vez, por eso fue lo primero que dije, no sabía cómo... Estoy atónita.
-¿Y cómo es que supiste lo de...?
-El doctor lo ha confirmado.
-Pero yo no te noto ningún cambio, ¿cómo es que estás tan segura?
-Mis periodos no han aparecido y los típicos mareos, antojos, dolores, etc... además, apenas llevo pocas semanas, ¿esperas que esté como un globo ya?
-No no - bajé la mirada -Y... ahm... ¿estás contenta con ésto?
-Sé que todo fue rápido pero, ¿tú lo estás?
-Debo confesarte que no estoy en mis cinco sentidos ahora... He estado fumando hierba y, mi estado no está muy fijo.
-¡¿Qué?! ... Paul, ¿por qué haces eso?
-Porque estoy solo Sally, completamente. Y bueno, he estado recordando momentos donde tenía compañía... y eran bastante buenos, me gustaba dejar un rato este lugar.
-¿Estás loco?
-Todos lo hacen.
-Yo no. Me encargaré de que dejes eso.
-¿Por qué?
-Porque sí Paul, quiero que mi bebé tenga un padre sano... no un padre drogadicto - tomó mi mano
Sonreí instantáneamente -... ¿Y es mío?
-Oh mierda Paul - rió y me soltó -Espera, ¿por qué me estoy riendo?
-Pues...
-¡Pero claro que es tuyo! ... tal vez, no sé. Estoy aquí por dinero.
-¿Qué dices?
-Es broma idiota, estoy 100% segura que es tuyo.
-¿Cómo lo aseguras?
-Porque es mi cuerpo.
-Entonces... ¿no has tenido relaciones desde aquella vez?
-No, menos con Albert.
-Bien bien, confío en ti - suspiré con una sonrisa -Vaya... me siento halagado.
-Nunca te mentiría... no con ésto, ¿qué ganaría con hacerlo?
-Tienes razón.
-¿Lo ves?

Tomó un sorbo de su té.

-¿Qué sucedió con Albert? ... ¿Te casaste con él? ¿Eres Sally Mussen?
-Cómo crees, antes muerta.
-¿Entonces qué sucedió?
-Le dije que no me iba a casar con él porque no lo amaba. Para empezar, él estaba saliendo con un alguien... así como tú y yo. Entonces, claro que no quería tenerlo cerca y al final no me afectó porque, al carajo... es Albert. Pero lo arreglamos bien, estuve sola un mes en París, en mi departamento... Iba a ballet y bueno, como los síntomas, dudé de si estaba embarazada o no, así que fui con mi doctor.
-¿Albert sabe de...?
-Sospechaba, y me buscaba. Decía que el bebé era suyo y yo... ¿cómo puede ser tuyo si ni siquiera me he acostado contigo en casi un año?

Solté una carcajada y la vi sonreír.

-Entonces... ¿tú estás contento?
-Me encantas Sally, me encantas demasiado... no sólo eso, te amo - me acerqué a ella -Y, claro... aún no me trago por completo la idea de que... ¡seré padre!
-Sí Paul - sonrió y me abrazó -Espera... ¿estás con alguien?
-¿A qué te refieres?
-Sí... - se separó de mí y me miró -¿Sales con alguien? ¿Tienes novia?, ¿esposa?
-No cariño, tú serás mi esposa.
-¿Qué dices?
-Tendremos que casarnos.
-Pero... ¿tan pronto?
-Pues, antes que el bebé llegue ¿no?
-Yo opino que debería de ser después... apenas salí de planear una boda y... - suspiró.
-¿Entonces?
-No lo sé, me gustan las sorpresas.
Sonreí -Te amo Sally, gracias por volver.
-Gracias por abrirme las puertas cuando más lo necesitaba... me estaba empapando.
Reí.
-Paul, me encantaría seguir hablando pero... ¿podría darme una ducha? Tengo miedo de tomar un resfriado y más con todo ésto. Ya sabes, no puedo...
-Claro claro. ¿Tienes ropa?
-Joder... se encuentra en el hotel.
-Bien no te preocupes, ahora te doy algo.
-Ok - se levantó.
-¿Quieres que te ayude?
-Paul, no te preocupes... no por ahora, yo estoy bien - sonrió -Vamos.
-... Vamos.

La miré desde atrás. Pero claro que estaba feliz, y no precisamente por el efecto de la droga.

01:36am.
-¿Cómo te sientes?
-Mucho mejor, me encanta tu baño... excepto por el aroma ese de la hierba aquella.
-Lamento eso.
-Está bien. Pero hablo en serio McCartney, debes dejarlo... aparte, me afectaría a mí igual, y al bebé.
-Tienes razón, prometo que lo haré.
Suspiró -Bien - seguía frotándose el cabello con la toalla -Debo regresar al hotel, ¿tienes dinero que me prestes? Juro que cambiaré mis francos cuanto antes y te lo regresaré.
-¿Para qué debes regresar al hotel? - me levanté y caminé hacia ella -Aquí estás bien.
-En primera: debo ir por mi ropa. En segunda: ¿cómo me quedaría aquí?
-Pues sí, mañana temprano vamos por tu ropa y... ¡Mañana es la boda de Ringo!
-Por eso.
-Bueno, mañana temprano vamos por tu ropa, llegas y aquí te quedas.
Sonrió -Gracias Paul, muchas gracias.
-Deja de agradecer, y acomódate como en casa.
Besó mi mejilla.
-¿Es que terminamos mal?
-No... ¿por qué lo dices?
-... ¿Puedo besarte bien?
Rió -Claro.

Besé sus labios suavemente.

Sábado, 12 de Marzo de 1966.

Narra Sally:



17:45pm.
Ahora Molly Landeú y Richard Starkey eran marido y mujer, hasta que la muerte los separara.

Eran tan tiernamente hermosos. Molly... ella sí que era rebelde, y Ringo... él era tan adorable que daban ganas de abrazarlo y nunca soltarlo. Polos apuestos siempre se atraen, y me alegra que haya sido así.

-¿Por qué lloras?
-Porque nunca imaginé que vendrías...
-Sabes que no me lo perdería por nada - sonreí y la abracé -Felicidades Molly Starr.
-Oh por Dios, se escucha tan bien - reí -Oye Sally, ¿le has dicho?
-Claro, fue lo primero que le dije, no podía soportarlo... creo que casi lo mato del susto.
-Tenemos que hablar de eso, eh.
-Sí sí.
-¿Le dirás a todos en la cena?
-Claro que no, este es tu día.
-¿Eso qué? Sería una gran sorpresa para todos además.
-Yo digo que puede esperar.

22:17pm.
Todos se encontraban cenando, bebiendo y recordando. Era una reunión pequeña, con los familiares de la bella pareja, amigos cercanos, etc.

-¿Comerás algo?
-Ya lo hice - sonreí -Es muy tarde para comer, ¿no crees?
-Bueno sí pero, una vez al año es pasable.
-Oh bueno.
-¿Segura no quieres algo?

Miraba la mesa del buffet. Mierda, ¿a quién engañaba? Moría por deborarme todo... pero no.

-Segura.
-Uhm... ahora vuelvo.

Miraba a la pareja principal, riendo mientras platicaban con la gente. Luego, miraba a George y Pattie, que compartían una copa mientras se secreteaban en sonrisas... después John y Cyn, que no sólo compartían una copa... sino la botella entera, y en este caso compartir significaba John y John.

-Listo.
Miré su platillo -... Oh.
-¿No te apetece?
-No gracias.
-Eh... Sally, ¿seguías bailando ballet cierto?
-Así es.
-¿Y es estricto?
-¿A qué te refieres?
-Sí eso de... tener que... estar delgada.
-Oh no, eso depende de ti.
-¿Y te agrada la idea?
-Me agradaba. Ahora tendré un bebé... ya no importa.

Ringo estaba por detrás de nosotros.

-¡¿Qué?!
-Ringo...
-No puedo creerlo... ¿están bromeando?
-¿Con qué?
-¿Tendrán un bebé?
-Shhh baja la voz.
-Sí Ringo - contestó Paul.
-¡No puede ser!
-Hey, ¿qué no puede ser? - John se había unido a la plática, así... de la nada.

Miré a Paul tratando de decirle con gestos, que los callara.

-Nada John.
-Sally, me alegra tanto que estés aquí.
Sonreí -Pensé que me odiabas.
-No no, ya no... ahora que estás con McCartney, todo bien.
-Y no sólo eso... van a ser padres.
-¡¿Qué?!
-Carajo.
-Miren miren, Paul McCartney... después de todo... sí que está potente.
Reí y miré a Paul.
-Claro que sí imbécil - dijo.
-Qué bello chicos, me alegro tanto.
-Esto merece un brindis.
-¡¿Qué?! Nooo, no... ¡John!

Traté de agarrar a John pero... era tarde. Tocó su copa con el cubierto y de pronto, todos guardaron silencio.

-Bien, ya que tengo su atención... Antes que nada, quiero felicitar a los tórtolos - señaló a Molly y a Ringo con su copa -Felicidades. Ringo... ahora estás atado a una mujer.
-Sólo John... - la voz de Cynthia venía detrás de mí y voltee.
-Cyn, dile que se guarde silencio por favor.
-¿Crees que me hará caso?
-... Pues... oh mierda. Ahora vuelvo.

Caminé hacia él con Paul detrás, temiendo que algo sucediera.

-Pero dejando eso atrás... quiero pasar a una grata sorpresa.

Nos miró y alzó su copa, señalándonos.

-Felicidades por el próximo McCartney en la familia.





//////




¡Y antes de que Septiembre termine!

Capítulo algo largo para lo que siempre escribo *se siente orgullosa* jajajajaja, es que me salió la inspiración y las ideas así, de pronto y bueno; tuve que aprovechar.

Mañana comienzan mis exámenes y necesitaba subir antes de que todo me abrume y caiga en rotunda depresión post-repruebo materias... espero que no pero, bueno... Papá, The Beatles me distraen.

Como sea, ¿cómo les pinta la vida? Espero que re bien.
Les quería escribir que me encantan sus capítulos y espero que suban pronto igual :} 

Saben que las adoro con todo mi pequeño corazón.

Hasta Octubreeeee, mi mes favorito.

Cuídense mucho,
besos.

♥ ♥ ♥


Imaginen que:
... es 1963, van llegando a un hotel en Londres y de pronto...



7u7



jueves, 25 de septiembre de 2014

Capítulo 84.

Jueves, 10 de Marzo de 1966.



"I'm Only Sleeping"

A veces me extrañaba la facilidad con la que John y yo podíamos conectarnos.

Sucedía que John no estaba en sus mejores momentos... y yo... bueno, necesitaba poner los pies sobre la tierra y dejar de navegar tanto tiempo.

Llevamos dos días de grabación seguidos, y al parecer estamos unidos, pero no dudo que a mitad de este álbum nos volvamos a separar. Todo porque, necesitamos dormir sólo un poco.

-¿Estás nervioso?
-Algo así...
-Pero no será una boda grande.
-No pero, nadie sabe lo que les espera después del matrimonio - agregó John.
-Molly y yo nos entendemos muy bien.
-Gracias por la indirecta naricitas.
Todos rieron -No es eso... Sólo espero que me vaya bien.
-Seguro, nadie se resiste a esa linda sonrisa.
-Y a esa hermosa nariz.
-¿Qué me dices de esos bellos ojos azules?
-Y lo que se encuentra detrás de su ropa interior.
Volvimos a reír -Me casaré más seguido para que tengamos vacaciones.
-Por favor Ringo, por favor.

Brian entró al set de grabación.

-¿Buenas noticias?
Miró a John antes de hablar -... Bien, hemos avanzado estos dos días.
-Hemos... Paul, George, Ringo y yo.
-Como sea John... Nos vemos dentro de un mes.
-¡Por fin!
-¿Un mes nada más?
-Cállate Paul, di que nos dieron algo.
Suspiré -Groovy.
-Los amo chicos, los amo.
George comenzó a guardar su guitarra -Nos vemos el sábado, querido Ringuis.

Después de platicar un poco acerca de los planes para el sábado, nos despedimos y salimos... cada quién tomando su rumbo.

Me encontraba buscando las llaves de mi auto cuando Ringo se acercó a mí.

-... ¿Qué sucede Ringo?
-Paul, de verdad... hoy no fumes hierba, ni mañana, ni pasado... ni nunca.
-No Ringo, no lo haré... Ya soporté dos días - sonreí.
-¿De verdad? - asentí y palmeó mi hombro -Me alegro.
-¿Qué pasa?
-Nada... nada.
-¿Seguro? Podemos ir a algún lugar y hablar.
-Es sólo que... me preocupas un poco.
-Oh Ringo, sabes que no lo haré...
-No lo sé.
-Bueno, te lo digo yo.
-¿Lo juras?
-Eh... sí, sí.
-Está bien, nos vemos entonces...
-¿No quieres salir?
-Ha llegado mi madre al departamento, ¿nos vemos mañana?
-Sólo si puedes.
-Yo te hablo.
-Claro...
-Hasta pronto.

Dio media vuelta y comenzó a caminar.

-... Hey, Ringo.
-¿Dime? - volteó.
-Eh... ¿vendrá Sally?
-... No sé Paul.
-Oh, es todo. Cuídate.
-Igual tú.

19:04pm.
-... Sí... llego el domingo, tengo que estar presente en la boda de Ringo.
-Está bien, sabes que puedes llegar cuando quieras.
-Gracias papá, no sabes cuánto lo necesito... siento que estoy cayendo poco a poco, hasta asfixiarme de todo.
-Ya hablaremos de esos ataques que te dan.
-Papá, es en serio.
-Paul, yo te creo pero debes comprender que siempre habrá momentos así.
-Es que no es sólo un momento, ya han pasado casi 3 meses y sigo completamente igual.
-Creo que tú más que nadie sabe por qué.
-... Necesito estar con alguien. Te veo el domingo, ¿si?
-Sí, estaré acá.
-Gracias papá.
-Te quiero Paul, por favor cuídate.
-Igual yo, y sí... lo haré.

O trataré... Ojalá me pagaran cada vez que escucho un "cuídate".

Colgué el teléfono e instantáneamente mis ojos se cristalizaron... fue entonces cuando me di cuenta que ni siquiera me reconocía.

¿Por qué carajo hago esto? Sería todo tan fácil si comprara un boleto a las Vegas y me fuera por al menos un mes, aunque quisiera una década, un siglo... tal vez hasta un milenio.

Fui directamente al baño y comencé a preparar lo que me relajaría. Los viajes que estaba tomando me comenzaban a agradar, ¿y por qué recordarlos?

Oh vamos, sólo será un poco.

***

Liverpool, 1958.

-Este es mi lugar preferido.
-He pasado tantas veces por aquí, y no me había dado cuenta de lo bello que es.
-Es que estoy yo.
Rió -Ah claro, se me olvidaba.
-Bonita vista...
-No es tan gris como la mayoría de la ciudad.
-Por suerte.

Nos dispusimos a buscar lugar entre tanto césped.

-Recuerdo que me encontré con John acá y comenzamos a discutir... bueno, un recuerdo no agradable.
-Por suerte ahora vienes conmigo.

Sonrió y la miré con una sonrisa igual.

-Pobre John.
-¿Por qué pobre?
-Ha perdido a Julia... por segunda vez.
-No creo que pobre sea la palabra correcta.
-Bueno... no quise decir pobre en ese aspecto... es que me llegaron tantos recuerdos con tan sólo verlo.
-Es duro.
-Demasiado.
-Pienso que cuando sea madre... si es que llego a serlo... 
-Claro que lo serás.
-No es una meta, pero espero.
-Tendrás hijos apuestos y talentosos como yo.
Rió y acarició mi mejilla -¿Apuestos? Pero si tú no eres apuesto, eres tierno... bonito.
-Oh...
-¿A quién engaño? Sí eres apuesto, muy apuesto.

Besé su mejilla.

-El caso es que, cuidaré de ellos.
-No te imagino así...
-¿Cómo?
-Siendo madre, es que Sally... eres tan Sally.
-¿A qué te refieres con eso, ah? - golpeó mi hombro levemente con su puño.
-Es que eres una chica rebelde.
-¿Una chica rebelde? 
-Ajá.
-Estás equivocado McCartney, ¿será que no me conoces?
-Puede ser... tendría que pasar más tiempo contigo.
-Tengo mi lado dulce, cursi y maternal... Una vez tenía un gatito y, lo cuidé muy bien.
-¿Qué le sucedió?
-Se me escapó pero, bueno... sólo eso.

Reímos.

***

El timbre y los relámpagos con ese estruendo borraron mi memoria instantáneamente.

¿Quién podría ser? Y a esta hora... Joder, me había quedado dormido de nuevo.

23:12pm.
Bajé lentamente con la vista hecha nudos. Me acerqué a la puerta y la abrí.

-¿Sally?

El efecto 'psicodélico' se había esfumado... no podía estar agonizando, ¿o sí? ... por Elvis, esto me había llevado a un límite.

-¿Sally, eres tú?

Su expresión fue algo dolorosa, con una sonrisa melancólica y una mirada baja.

-Sally, espera... - toqué mi cabeza -¿Tú eres real?, ¿no? ... Estás aquí, en este momento ¿o no?

Abrió la boca pero las palabras parecieron borrarse de ésta en un segundo... Seguía sin decir nada.

-¿Qué haces aquí?
-...
-Sally, pasa... te estás empapando.

Dio un paso frente a mí y levantó la mirada, esa mirada quebradiza.

-¡Dime algo y comprueba que eres real!

Tomé sus hombros y la sacudí un poco, entonces... sentí sus brazos rodearme, y supe que estaba ahí... se encontraba ahí.

-Vamos, dime qué sucede.
-Paul...

Su voz estaba quebrada.

-... Estoy embarazada.








/////





¡Hola hola mis bellas lectoras!

Igual me sorprendió, si me quieren matar está bien, si me quieren abrazar :} también :} si quieren llorar conmigo... también, también. Quería subir lo más pronto posible, resulta que este capítulo nació de la nada y bueno, es lo que tenía que suceder según ésto así que... bueh.

Ayer fue cumpleaños de mi mayor inspiración en este mundo: Linda Eastman mejor conocida como Linda McCartney.



Muchas chicas (me incluyo) mataríamos por ser como ella, y vivir lo que vivió... con todo y la fortaleza de su enfermedad hasta el último momento. Espero que donde sea que se encuentre, esté con Paul, Heather, Mary, Stella y James.

Bueno... espero que estén muy bien. 
Las adoro con todo mi <3

Besos,

♥ ♥ ♥



jueves, 18 de septiembre de 2014

Capitulo 83.

Lunes, 7 de Marzo de 1966.



-Gracias por venir ayer.
-No hay de qué.
-Paul... - Brian se acercó a mí -Esto es serio.
Lo miré.
-Y ha llegado a un punto donde todos pensamos que necesitas ayuda.
-¿Ayuda con qué o por qué?
-Con las drogas.
-Brian, sólo fueron dos cigarros en todo el maldito día... para más, John necesita entonces un hospital.
-... Te quedaste dormido en la bañera.
-Bueno... eso pasa.
-Pudiste haberte ahogado.
-Pero estoy vivo, y estoy muy agotado. Deberían darnos vacaciones de una buena vez, en poco tiempo iniciaremos una nueva gira.
-Te pido esta semana y eres libre, completamente... hasta Abril claro.
-Me parece prudente.
-¿Si?
-Sí... Comencemos a grabar entonces.

Tomé mi bajo y lo coloqué en mis piernas. Comencé a marcar los acordes de la canción que se encontraba ahí... una que George había dejado.

Pasaba que, ahora todos trabajábamos por separado. ¿Y por qué carajo?

-Listo.
-¿Es todo?
-¿Y qué más puedo hacer? George no está aquí para indicarme.
-Si hubieras llegado ayer...
-Pero no todos los días son ayer. Hoy es hoy, ¿por qué no está aquí?
-Ha tomado el día.
-¿Y John? ¿Y Ringo?
-Sabes que la boda de Ringo es este fin de semana.
-¿Ah si?
-Ufff, sí Paul. ¿Qué te sucede? Estás completamente perdido.
Bufé -Mejor nos vemos mañana, como te digo, me hace falta descansar.
-Buena elección.

Salí del lugar, caminé hasta mi vehículo y subí. Era hora de manejar y olvidar todo lo que pasaba en el set de grabación; pensaba que era mi culpa de algún modo. Todo por hundirme en esa idea de Sally, y es que no quería tener problemas... ni que fuera el mismo Paul de 1958. Ni siquiera me afectó, pude escaparme en Hamburgo.

... Tal vez eso es lo que necesitaba... unas vacaciones... unas largas vacaciones a Hamburgo. O tal vez, sólo en casa; al lado de cigarrillos, algunas chicas, mi bajo y un papel con lápiz para escribir.


***



Hamburgo, 1960.

-¿Sally?
Asintió.
-¿De verdad?
-Sí.
-Qué mierda - susurré al oído de John con una carcajada.
-Te persigue, te persigue.
-¿Quieres ir a bailar?
-Claro...
-Nos vemos después - guiñé el ojo.

02:24am.
Hamburgo no era un lugar donde hubiera límite de tiempo. Simplemente era otro día, en noche... no importaba quién estuviera o no despierto, la ciudad era sinónimo de fiesta.

Y más para nosotros... unos chicos de Liverpool.

-¿Y esa tal Sally?
-Ya se fue.
-¿Tan rápido?
-Era una chica de college.
-Se notaba... y era medio callada.
-Decía que venía de Canadá.
-Educada.
-Algo así.
-¿Y para qué te acostaste con ella? Para tener la satisfacción de decir: ohh Sally... - dio un gemido leve tratando de imitarme -¿Eh?
-Cállate Lennon, no vuelvas a hacer eso que voy a vomitar.
Rió.
-Qué inteligente - escuchamos a Stuart.
-Hey Sutcliffe, cálmate... no me he metido contigo.
-Ni yo.
-Perfecto.
-Cálmense las dos pequeñas señoritas, hay mucho John Winston Lennon para ustedes.
-Ah, cállate John - dijimos al mismo tiempo.
-Bien bien - guardó silencio y pensó un poco -Oye Stuart, ¿le escribirás a Sally esta vez?
-¿Por qué no?
-Nunca le escribe - agregué.
-¿Y qué caso tiene pequeñín? De todas maneras, nunca contesta...
-Touché McCartney, touché.
-Se llama desahogarse.
-Yo sé muy bien qué es eso, y te aseguro que se hace mejor con pintura y un lienzo... no vengas con que ahora sabes muy bien qué es desahogarse.
-Al menos yo escribo.
-Yo toco el bajo de espaldas.
-Eres grande, tan grande como Elvis.
-Tan grande como Paul McCartney.
-Heyyyy... Paul, tranquilo viejo... y Stuart, no compares a Paul con Elvis por favor, con mi Elvis no.
-Bien Johnny - suspiró.
-De todas maneras, ¿qué caso tiene ya? Tú estás con Astrid.
-Cierto, ¿qué caso tiene? Tú te acuestas con jovencitas, yo tengo una novia formal... todo está perfecto, ya nadie recuerda a Sally.
-Sí Stuart, lo que tú digas.
-Así me gusta.
-Que sueñes bien.
-Gracias, nos vemos dentro de unas horas.
-Descansa Stu.
-Igual tú John.

Hubo un silencio repentino después de lo último que dijo Stuart.

A veces Stuart llegaba a ser tan frío y crudo... pero John sabía que era más cálido que él, y que yo. Hace poco, descubrí unos escritos, no recuerdo muy bien cómo eran, qué genero o... si eran cartas para cortarse las venas, tanto por su contenido.

Sally Jaucemelt.

Parecía que todos querían olvidarse de ella, y se desquitaban escribiendo. Supongo que ella se había olvidado de todo. Fácil y sencillo... aunque no estaba muy seguro, y por eso es que seguía escribiendo, con esperanza.

No quería olvidarme de ella aunque aparentara, aunque quisiera.

Stuart la extrañaba.
Yo la extrañaba... y la seguiré extrañando.





***


Desperté de golpe y abrí los ojos... sólo había oscuridad. Yo, mi cama, la mesita de al lado con el cenicero y aquellos cigarrillos.

Joder, otro de esos malditos viajes nostálgicos y ni siquiera despertaría.







/////






¡Mis queridas y bellísimas! 

Antes que nada, disculpen este corto capítulo; sé que siempre prometo algo mejor pero es que, esto es como un "paso" a lo que sigue. 

Sé que todas queremos que Sally y Paul estén juntos, pero es que... chiks, ¿yo que puedo hacer? Jajajajajaja bueh, pasa que te metes en la historia... y en los personajes y tiene que ser realista. *Si claro, más por el amorío Beatle* ... en fin, ya vendrán muchas sorpresas, se los prometo.

Tengo que apresurarme ya que el colegio tendrá periodo de exámenes como regalo de cumpleaños y :) pues :) yo :) no :) sé :) si :) reír :) o :) llorar :) el caso es que tengo que estar concentrada porque después, me va de lo peor y... lo demás es historia.

Dejando todos esos temas horrorosos atrás... ¿Cómo están ustedes? Espero que re bien, y que suban pronto en sus fics 7u7

Las adoro demasiado,
cuídense mucho.

Besos.

♥ ♥ ♥



pd: 2 sassy 4 you



sábado, 13 de septiembre de 2014

Capitulo 82.

La fama de The Beatles va creciendo en un punto algo extraño. Las drogas han invadido nuestras escrituras y bueno... los cambios repentinos no andan muy bien que digamos.

No he sabido nada de Sally desde la última vez en 1965. Tal vez ya se casó... tal vez ahora es Sally de Mussen. Cuesta creer que mi vida rotó completamente en tan poco tiempo.

Pasando a otros temas menos "dramáticos":

George se mira bien al lado de Pattie... y ni siquiera hablemos de Ringo, el muy galán se ha comprometido en año nuevo, que por cierto, la boda será en un par de semanas, no dudo que sea algo sencillo. Ah, ¿y John? ... John se encuentra aferrado a Cynthia y Julian, pero con amoríos por detrás, como todo un Lennon.

Y yo... bueno, yo sigo viviendo.



Domingo, 6 de Marzo de 1966.

-Paul... ¿vienes a la cama?
-En unos minutos.

Comencé a preparar mi cigarrillo especial, aquellos que Mr. Bob Dylan nos había recetado.

-Francie, te dije que ya iba - la miré por el espejo.
-¿De nuevo eso?
-¿Qué tiene de malo?
-Todo.
-Al carajo. Tú a lo tuyo, yo a lo mío ¿si?

Reviró los ojos.

-Mejor deja de hacer gestos y prepárate uno.
-Esa cosa me deja muy mal.
-Entonces te veo luego.
-No dije que no quería...
Sonreí -De prisa, que no aguanto más.

17:38pm.
-Paul...
-¿Eh?
-¡Paul! - abrieron las cortinas y los rayos del sol de primavera, molestaron mi vista.
-¡¿Qué?! - lo miré molesto -¿Qué haces aquí?
-Me dejó pasar... eh... no recuerdo su nombre.
-Ah ya - me voltee -¿Has visto a Francie?
-¿Francie?
-Cierto, tú no la conoces.
-¿Otra que cae ante los pies de Paul McCartney?
-No es nada serio, sólo diversión. Si la vieras... tiene un cuerpo que...
-Sí sí, no me interesa - interrumpió -¿Será que puedes arreglarte para ir a grabar de una vez?
-¿Qué carajo? Si es domingo, ¿por qué?
-Porque lo ha pedido Brian.
Suspiré -Luego te alcanzo.
-Oye...
-¿Qué?
-¿Qué te sucede?
-Nada George, ¿por qué lo dices? Me encuentro muy bien, no sé qué tiene de malo que sólo quiera descansar... - comenzaba a subir el tono de voz -... una maldita vez en la vida.

Negó con la cabeza y puso un gesto de... decepción.

-Paul...
-¡¿Y ahora qué?!
-Sólo... apresúrate.
-Sí George, sí.

George salió de la habitación. Me levanté, repasé mi rostro con mi mano y miré alrededor algo mareado... Caminé como pude hasta el baño, abrí el grifo de la bañera y me quité los pantalones de pijama.

Miré la mesa donde reposaba el cepillo de dientes y la pasta dental... ah, y mis cigarrillos especiales. Tomé uno sin pensarlo dos veces, lo encendí y calé lentamente... Por último, me sumergí en la bañera.

-Sally... Sally... - suspiré mientras cerraba los ojos -¿Por qué es tan difícil todo lo que está sucediendo? ... Si nosotros nos amamos con todo nuestro maldito ser, ¿por qué tiene que ser tan complicado? Qué chocante.

¿Estoy hablando solo? ... Mierda, creo que las drogas comenzaban a apoderarse de mí. Tanto, que a mi mente llegaron esas escenas que te 'atormentan' gracias al recuerdo.

***

Liverpool, 1958.

-Y lo leí... pinté la portada porque expresaba... ya sabes, esa belleza que te deja cautivado. Como sea, lo pinté y ahora no sé que hacer con el cuadro.

Los veía detrás de esa pared grande. Se encontraban sentados, tan cerca como si fueran uno solo... Los celos fueron los primeros en aparecer.

-Sería bueno exponerlo, seguro les encantaría tanto como a mí.
-¿Crees?
-¡Por supuesto! ... ¿Sabes? Me encanta como pintas... como creas el arte, el significado que le das.

Otras palabras más e iba a explotar.

-Te aprecio Stuart, y demasiado.
-Igual yo Sally. Quisiera que fuéramos tú, yo y nada más... - tomó su mano y sonrió al instante.

Bajé la mirada, no soportaba ver tal escena. Y comencé a caminar hacia el college donde me vería con John.

-¡Por fin! ¿Dónde estabas?
-Caminando... buscándote.
-Uhm, ya veo. ¿Te encuentras bien?
-Eh, sí sí... ¿nos vamos?
-Sí, pero antes déjame darle algo a Sally, no tardo... ¿o vienes?
-No, te espero aquí.
-... Deberías ir por ella y no sé... llevarla a un motel o algo así.
Reí -Idiota.
-¿Que tendría de malo?
-John...
-Dime algo, la quieres ¿no es así?
-... Sí.

***

Volví a calar profundamente aquél cigarrillo.










/////


¡Mis queridas y bellísimas lectoras!

Lamento el capítulo de hoy si es que se le puede llamar así "capítulo", es muy corto; pero no quería estar tan ausente aquí como siempre.

Espero que se encuentren muy muy muuuuyyyy bien.

Las adoro con todo mi corazón a cada una de ustedes, y gracias por todo :-)

Cuídenseeee, besos.

♥ ♥ ♥



lunes, 8 de septiembre de 2014

Capitulo 81.

Martes, 28 de diciembre de 1965.

Narra Paul:

Me acerqué a ella después de borrar mi sonrisa. Quité sus manos de su cara y me abrazó al instante, algo que me impresionó.

-Te odio Paul McCartney.
-Yo te amo - le susurré -Felicidades Sally.
-Gracias... - se separó de mí.
-Awww, chicos... creo que voy a tener un ataque de emociones aquí. Disculpen, creo que ando muy sensible.
-Ay, cállate Lennon - Sally lo miró para después mirar a todos los demás que acompañaban con risas gracias a la escena -Y... gracias a todos también - sonrió.

La gente comenzó a saludarla y felicitarla. Algunos viejos amigos de Sally, algunos amigos de John que claramente, sólo venían por una copa... o tal vez dos... quizá tres. Y amigos de The Beatles.

-¡Astrid!
-Hola Sally, muchas felicidades.
-Gracias - la abrazó -¿Cómo estás?
-Muy bien, ¿y tú?
-Bien, todo va mejorando.
-Me alegro... Mira, quiero presentarte a un gran amigo, y de Stuart.
La miró y sonrió -Eres la famosa Sally - ofreció su mano -Klaus, mucho gusto.
-El gusto es mío - la estrechó.
-Y felicidades... espero que la hayas pasado muy bien.
-Muchas gracias - se sonrieron.

Molly llegó, saludó y susurró algo al oído de Sally.

-Disculpen pero, ¿qué les parece si nos vemos después?
-Claro.
Sally me miró -Y después necesito hablar contigo...
-Eh... por supuesto.
-Bien... Adiós por el momento.
-Adiós - dijo por último Klaus.

Vimos como Sally desapareció al lado de Molly. Después, miré a Klaus con una ceja encarnada.

-Astrid, Sally... Ese Stu tenía buen gusto.
Astrid sólo rió al mirar mi expresión -Mejor vamos a saludar a los demás chicos, ¿qué te parece? - palmeó su hombro.
-... Ya qué. Nos vemos McCartney.
-Que te vaya bien.

23:27pm.
-¿Y Sally?
-Estaba en una habitación con Molly, Cyn y Pattie.
-Gracias Ringo.

Subí las escaleras y caminé por el pasillo hasta llegar a la habitación donde se veía el resplandor por debajo de la puerta indicando que las chicas se encontraban ahí.

-Mejor me quedo descalza.
-¡No Sally!
-No seas ridícula...
-Se ven muy bien.
-Pero no en mí, sólo haré una escena cómica.
-Mira, te ves más alta.
-Así podrías besar a Paul sin ningún problema.
-El chico parece que toca el cielo - Molly rió.
-Comienzas a rebelarte porque te das cuenta que para besar a  Ringo tienes que incarte.

Todas rieron, incluyéndome detrás de la puerta.

-Bueno, el caso es que es adorable.
-¿Y Paul no?
-Sigo insistiendo en que es Ringo.
-¿Qué tal John?
-Bueno... John es John - Cyn rió -¿Qué me dices de George, Pattie?
-Tiene su encanto.

Escuché pasos en el pasillo y voltee al instante. Suspiré de alivio, por suerte era George.

-¡Hey, George! - levanté los brazos -¡Ven aquí! - grité en susurró -Pero cállate.
-¿Qué sucede? - se acercó a mí.
-Shh... escucha...

Volví a pegar mi oído a la puerta y George me imitó.

-Todo resultó perfecto, aunque toda la tarde pensé que Paul se iba a convertir en un desgraciado.
-No me digas que no lo ha sido ya.
-Sí pero, siempre sabe como solucionarlo ¿sabes?
-Deberías quedarte para siempre... con él.
-No... yo no... ¿qué pensarán todos? Ya sabes... con eso de que estoy comprometida y vengo a ver a Paul McCartney.
-Nadie piensa que eres una cualquiera si esa es tu duda.
-¿Cómo están tan seguras?
-Seguro y hasta el comité de fans está de acuerdo.
-¿Crees?, pensé que Jane y Paul eran la pareja perfecta de Londres.
-Supuestamente.
-Son novios y no se han visto en meses... wow.
-Bueno... quieren su espacio.
-Ya hay que aceptarlo, Paul no la ama.
-Mira, tal vez no la ama pero sigue con ella así que... - suspiró.
-¿Qué?
-Pues... nada... es un idiota.

George rió levemente y golpee su hombro.

-Todos los hombres son unos idiotas... y más esos Beatles.
-No creo que Pattie opine lo mismo.
Rió -A veces George llega a ser un poco muy idiota.

Reí y miré a George.

-Cállate... - susurró.
-Esperen... creo que escuché algo - era la voz de Molly.
-¡Vete George!
-¿Qué?
-¡Que te largues antes de que nos vean!

George caminó rápidamente hasta bajar las escaleras y yo decidí entrar al baño.

Se escuchó la puerta abrir -Quería desahogarme un poco.
-¿Te pondrás las zapatillas?
-... Claro.
-Vamos entonces.
-Pero primero pasaré al baño... las veo después.
-Bien.

Entre abrí la puerta un poco y las vi bajar. Después, decidí abrir la puerta por completo.


-Paul...

Y la miré. Joder... ¿cómo describirla? Tan hermosa y sutil que me dejaba sin oxígeno.

Rió -¿Ya terminaste?
-Eh... sí.
-¿Puedo pasar?
-Sí, sí.
-Bien - pasó al lado de mí y se miró rápidamente al espejo.
-Te ves muy bella.
-¿Tú crees? - me miró.
-Sí, absolutamente.
-Gracias... me han dado unas zapatillas pero, no puedo caminar con ellas así que... serán para otra ocasión.
-Me parece perfecto.
-Y tomé una ducha antes, por eso tardé tanto pero... ya podemos bajar.
-¿No querías platicar conmigo?
-Sí pero... ¿la fiesta se irá a largo?
-No... mañana hay trabajo y grabaciones.
-Entonces hablamos después.

Miércoles, 29 de diciembre de 1965.

Sólo quedaban John, George, Ringo, cada una de sus chicas, y Astrid con Klaus.

-Tenías razón pero sigo con la duda.
-¿Qué duda?
-Si es porque mañana hay trabajo o es porque los londinenses son muy aburridos.
-Te aseguro que es lo primero... Ya verás, en año nuevo no termina la fiesta.
-¡Bien pajaritos! ... los dejamos.
-¿Tan pronto? - preguntó Sally.
-Sí, mañana tenemos que grabar.
-Así que, por favor, deja que Paul descanse.
Reí sarcásticamente -Sí Lennon, sí.

Todos comenzaron a despedirse de todos y poco a poco sólo quedamos Sally y yo. La besé rápidamente y tomé sus piernas para cargarla hasta mi habitación.

-¿Es tu casa?
-Hmmm, sí.
-¿De verdad?
-Sí, ¿por qué dudas?
-No sé... es muy bonita y acogedora.
-Me alegra que te haya encantado.

La recosté en la cama.

-Paul... antes de todo esto, quería matarte ¿sabes?
Reí -¿Por qué?
-Porque en la mañana sólo habías dejado una nota... y pensé que nada iba a resultar bien.
-Fue poco pero... me esforcé un poco.
-Y te lo agradezco - sonrió -Gracias Paul.
-No tienes que agradecer.

Nos quedamos en silencio y nos miramos.

-Mañana me voy Paul... me voy... y ya no te veré... jamás.
-Por... ¿por qué dices eso?
-¿Recuerdas lo que dijiste la última vez? Ya no querías verme cuando fuera una Mussen.
-Fue muy tonto de mi parte... claro que quiero verte pero temo querer robarte y... nunca regresarte.

Sonrió y acarició mi mejilla. Comencé a besarla lentamente mientras metía mis manos bajo su vestido, tocando sus piernas lentamente.

Bajé el cierre de su vestido por fin y ella comenzó a desabotonar mi camisa. En poco rato, ya no contábamos con prenda alguna.

Me impulsé a ella lentamente como si fuera la última vez que realmente la vería... y tal vez así era como iba a ser, por eso no quise despegar mis labios de los suyos a menos que se me ocurriera decir algo que explicara lo que sentía en ese momento.

-... Te amo.
-... También yo... - hundió sus dedos en mi cabello mientras gemía un poco.

Mientras, mis manos recorrían su rostro, sus curvas... sus piernas... Supe que la extrañaría más que a nada.

02:46am.
-Sally...
-¿Hmm?

Me tenía abrazado a ella, dulcemente. Era lo único que podía producirme calor.

-Jane y yo... ya no tenemos ningún tipo de relación.
-¿Qué dices?
-Eso. Sólo soy yo ahora.
-... Oh Paul... quisiera que este momento nunca acabara.
-Y yo.

Besé su frente.

-Y yo...








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Pasa que me asusta lo cursi que puedo llegar a escribir.

¡Mis bellísimas! Quiero pedirles una gran disculpa; y sé que siempre que subo lo hago por tardame siglos, milenios y todo pero es que... bueno, la última semana no ha sido de lo mejor y, la 'inspiración' se me había borrado junto con las ideas. Les prometo escribir mejores capítulos ya que son los finales, y tratar de subir pronto. Por ahora, no creo que este capítulo esté tan largo como creía pero, espero que les guste ( ͡° ͜ʖ ͡°)

Muchísimas gracias por esperar, leer, comentar y dar su buena vibra ~~ juro que las quiero muchísimo porque si ustedes no me dan ánimos, ¿quién rayos? 

Sofia que apenas va leyendo bienvenida por cierto.
Cami, my dear
Darling lovely Mary Lucy jajajaja, me gustó eso.
Mi comadre Cata
Y Vicky querida disculpa lo de mi blogger :(

Ya pues, las adoro mucho.
Espero que les vaya muy groovy,


<3 <3