Capitulo 77.

Viernes, 25 de Junio de 1965.

El timbre de la puerta fumigó todo lo que sentía en ese instante. Bajé las escaleras, me acerqué a la puerta, tomé mi abrigo y abrí.

-Tienes que llevarme al hotel.
-... Sally...
-Por favor.
-Está bien, vamos.

Narra Paul:

23:42pm.
-Hola cariño, lamento si te desperté... Sólo para avisar que mañana llego... Bien bien, ya terminé de empacar por suerte... Igual yo. Me alegra que estés en Londres... Por supuesto... Yo también... Cuídate... Adiós.

En cuanto colgué el teléfono pareciera que la llamada se había regresado. El teléfono volvió a sonar.

-¿Hola? ... Ah, si... Ahora bajo... Gracias, hasta mañana...

Me miré en el espejo unos diez segundos y salí de la habitación. Fui hasta el elevador y al entrar, sentí la asfixia más grande de mi vida, ¿cómo carajo tenía que actuar ahora?

Después de que se abrieran las puertas, la vi de espaldas, probablemente a unos cinco metros de mí... Caminé hasta llegar a ella y toqué su hombro.

-¿Qué sucede?
-Paul...
miré a recepción -Te parece si... ¿hablamos en mi habitación?
-Claro, claro.
-Sígueme.

Sábado, 26 de Junio de 1965.

-Y no supe cómo actuar Paul... - suspiró -¿Te he dicho lo difícil que es?
-Sally, no sólo para ti. Pero es que... es que... siempre es lo mismo... Siempre es igual.
-Una vez no fue así, ¿y qué sucedió? No resultó.
-Creo que estamos destinados a que sea así - reí un poco sin ganas de hacerlo -¿No crees?
-... No.

Al ver que tomó asiento a un lado de mí, me levanté y caminé hasta el balcón.

-Paul...
-¿Cuándo te casarás?
-No sé... A más tardar en Septiembre.
-Asegúrate de que Albert no mande invitación porque sino, vengo a robarle a la novia.
Rió -... De verdad, ¿ya nunca nos veremos?
-Tal vez sí... una última vez antes de que te cases.
-¿Por qué no me quieres ver cuando sea una Mussen?
-Porque esa gente me da náuseas.
suspiré -Qué mal... - cruzó los brazos y se acercó a mí -Me encanta este hotel.
-Igual a mí.
-Me trae muy buenos recuerdos...
La miré -Igual a mí - sonreímos y tomé su mano -Sally, no me cansaré de decir que fue mi culpa.
-Será mejor que te canses... No lo fue.
-Lo fue... ¿Sabes? Yo sigo con Jane... y hace poco su madre me ha pedido prácticamente que nos casemos.
-¿Y qué dijiste?
-No supe qué decir. Le compré un anillo, pero no se lo he dado.
-¿Se lo darás?
-No sé... es difícil como dices.
-Deberíamos escaparnos.
-Tus ideas siempre me atraen...
-Será difícil hacerlo.
-Porque ¿soy Paul McCartney?
-¿Y por qué más?
Reí -Cierto.
-... Paul, debo irme ya... Te vas dentro de 4 hrs.
-¿Quién te dijo?
-Contactos...
-John está enojado contigo...
-¿Ah si?
-Sí, ya sabes que es el maduro de los cuatro...
-¿Qué dijo?
-Que como era posible que te casaras con ese imbécil y... ya sabes. George está dormido como siempre, así que no pudo decirte, sólo queda Ringo.
-Los conoces muy bien.
-Claro, son mis hermanos.

Palmeó mi espalda y besó mi mejilla. Pude percatarme que unas lágrimas la acompañaban.

-Suerte.
-Has dicho que mientras no sea una Mussen soy bienvenida a tus ojos... Así que no te despidas formalmente.
-Si fuera así, la cama ya estaría hecha un desastre.
Sonrió -Te quiero Paul.
-... Yo también.

Dio media vuelta.

-¿Quieres que te acompañe o...?
-Te recomiendo disfrutar de la panorámica de París - interrumpió.
-... Nos vemos Sally.
-Nos vemos...

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No puedo creer lo tonta que me ponen esos Beatles... son simplemente demasiado. Su talento, sus composiciones, su belleza; todo. Y bueno... sólo quería escribirlo (???)

¡Mis queridas lectoras! Las extrañaba demasiado. Seré sincera: no he tenido buenas ideas para esta fic, me he bloqueado muy feo, pero bueno... ha salido este capítulo un poco muy malo. Prometo que los siguientes serán mejores, ya que no le queda mucho futuro.

Por otra parte, quería decirles que me agrada mucho que comenten, que lean y que les agrade. Saben que las adoro muchísimo, y prometo pasarles fotos de mi viaje.

Espero que estén muy bien. Cuídense mucho, y que tengan una bonita semana.

<3